18 may 2011

La plaza pública ( II )

[imagen Tokyo modified by Urban]

Vivimos en una tradición filosófica que ha creído posible que la obtención de una verdad absoluta era posible. No hace tanto no nos diferenciábamos demasiado de esas culturas donde las leyes son dictadas y deben respeto a la gracia divina. Y a veces continuamos pensando que así puede llegar a  ser, eso sí, intercambiado gracia divina por cosas rarísimas. Lo peor que podemos hacer es negar nuestra capacidad para inventar aquello en lo que queremos creer. Esta cualidad es la única que nos separa y al mismo tiempo nos une, en otras palabras, somos en la medida que participamos del espacio público, de la razón pública. No hay duda, la banalidad del mal consiste en repetir juicios externos.

10 may 2011

La plaza pública ( I )

 
 [imagen by Urban]


Desde que queremos ser modernos, se sabe que la emancipación del hombre pasa inevitablemente por el dominio del espacio público. El dominio del espacio constituye el elemento sustancial del poder social: –compañeros tomemos las calles ¡! [es una frase que se ha repetido en diversas ocasiones y circunstancias a largo de la historia]. El poder, o las personas detrás de él, han luchado por determinar la hegemonía ideológica y política controlando el espacio público, es decir, controlando las experiencias personales y sociales. Y volvemos a preguntarnos por el espacio web 2.0 …. Parece obvio afirmar que están apareciendo nuevas experiencias sociales, las que indiscutiblemente se están intentando dominar. Y la pregunta vuelve a ser: ¿estas ‘nuevas’ experiencias se están trasladando al espacio no mediado?

2 may 2011

* poder ser *

[imagen by Urban]
La transcendencia consiste en creer en una realidad superior, según la cual se pueda establecer lo que está bien y lo que está mal. Poca importancia tiene que situemos esa realidad superior en el cielo, en el socialismo, en la promesa de un mundo mejor, en las ideas o en el futuro. Pero parece que necesitamos transcender, por más necia que nos resulte la idea de progreso. La arquitectura y el urbanismo han sido los encargados de materializar, es decir, de terrenalizar lo transcendente.